En lo que queremos ser y no somos y en lo que somos y seremos.
No son horas sanas de escribir, el silencio, la noche y los fantasmas se pueden mezclar creando dudas y caos.
Pienso que escribir me debilita, me enjuaga y me calma.
Pienso en diámetros, formas y cosas sin sentido también.
Pienso en las razones; sin ahínco y en su método. El método de las razones.
Pienso en una conversación inteligente llena de sentido, convicción y sentimiento. En un refuerzo de verdad, de sinceridad absoluta que acabará con los roces al punto y regenerará los suspensivos.
Se mezcla sencillo y complejo y nace metáfora.
Concluyo que ésto no es insomnio, es preocupación, peligro, amor y lógica.
¿Amor y lógica?
Sólo que me lleve y me saqué de aquí.
Dónde las formas conocidas no existan, algo nuevo, genial e indescriptible.
Algo que sólo se pueda contar con la punta de la lengua, de lo dedos, con la punta del tacto.
No quiero percepción extransensorial descrita, quiero expresión extrasensorial sentida.
Deprisa, demasiado deprisa para escribir/lo/ la/ le.
Silencio.
Barra, guión, punto y sonrisa.Y así acabo.
Ente que me acabas de leer...manifiestaté ;-)ó colega tirate el rollito y ya que me has leído y es la hora que es, di algo, coño¡¡ ó joder con las putas lecturas ó gracias amable desconocido-da ó quién me habrá leído ¿? ó...
ResponderEliminarY el infinito y el más allá.