Aquí estoy.
Es una gran frustración que te guste escribir y dejar de hacerlo por cruzar la línea de lo irreal.
Tengo una sensación extraña.
Es que este blog no es mi blog, es el nacimiento de un residuo.
Extraño y sentido.
Él se llevo todo.
Demasiado poder el de las palabras, demasiadas verdades, demasiadas mentiras.
Intento recomponer las líneas muertas de un desastre ecologico, nacido en mi habitat interno, es complicado, es el proceso de una medida, qué ingenua, lucha por contenerse.
¿Cómo acabara ésto?
El escribir será una de la pocas constancias de que pasaste por el mundo, cuando llegue el momento de partir.
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