Ángel de la guardia y de la custodia de la mayor de mis desdichas:
Si no estuvieras respirando los reflejos de los cristales, te podría preguntar...
Si estás bien, si eres feliz, si de lo único que sigues teniendo miedo es del dolor, si el riñón te da problemas, si sigues escribiendo, si ya son más de seis, si las canas te superan, si la gomina se te acaba, si la casa tiene color, si tu habitación se te ha quedado pequeña, si tu padre está bien, si tu madre te sigue aguantando los berridos..
Si sigues coleccionando libros a diestro y siniestro, si sonríes cuando puedes o cuando te dejan...
Si sigues coleccionando libros a diestro y siniestro, si sonríes cuando puedes o cuando te dejan...
Si no estuvieras respirando los reflejos de los cristales, te podría preguntar...por qué no podemos ser amigos.
Tu recuerdo se debilita y tiro de lo que puedo...no me gustaría olvidarte, Ángel.
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